A lo largo de los últimos años ha crecido la opinión popular de que aquellas obras realizadas en edificios muy probablemente vendrán acompañadas de unas Ayudas por parte de los organismos públicos.
Recurrentemente como Administradores recibimos la pregunta de “Pero hay ayudas no?”
Hemos escuchado como ciertos profesionales garantizaban la recepción de las mismas, razón por la cual los propietarios asumían créditos u otras obligaciones, entendiendo que, mínimamente, un 40% sería a cargo de las Administraciones.
Nada más lejos de la realidad.
Independientemente de los requisitos para la obtención de las ayudas (que no son pocos), durante el mes de abril se publicaron la resolución a las Ayudas a la Rehabilitación de Edificios.
Se conoce que se presentaron aproximadamente 3.000 solicitudes, de las cuales se han concedido una de cada diez.
Este dato es clarificador de una situación insostenible.
Quien garantice que las ayudas se van a recibir al 100%, desconfíen.